En tres tiempos se divide la vida: En presente, pasado y futuro; de éstos el presente es brevísimo, el futuro dudoso y el pasado cierto... (Lucio Anneo Séneca)

miércoles, 4 de mayo de 2016

El palacio de los Marqueses del Carpio

El cuadro de la Venus del Espejo y un atentado al Rey

Fachada Palacio a  la Calle La Feria












Ubicada muy cerca de la puerta de la muralla que se le denominó puerta de la Piscatoria o de las Pescaderías y dándole la espalda a la calle Cabezas y lindando con el Arquillo, se encuentra la única casa fortaleza que podemos admirar en la ciudad.
La portada adintelada que te hace recordar un castillo da paso a lo que antaño sería un patio de armas
Tres mil metros cuadrados de superficie donde no sabemos exactamente su origen... 
Según D. Miguel Muñoz Vázquez en su articulo que aparece en el Boletín de la Real Academia de Córdoba de Ciencias, Nobles Letras y Bellas Artes de 1961, señala que: "este palacio tiene un subsuelo rico en elementos pertenecientes a las culturas antiguas que se asentaron en él, hallándose varias monedas y dos idolillos de barro de la época íbera".
Se puede apreciar la bella puerta de estilo mudéjar
En el nivel romano y durante una excavación en el patio principal se encontró, a unos cuatro metros de profundidad, el pavimento completo de una casa romana, siendo muy posible que se remonte a la época del emperador Augusto, cuando se ensanchó la ciudad por el lado Sur.
La traza de esta casa -continua D. Miguel A. Muñoz Vázquez- es de tipo vitruviano, por su vestíbulo que aún está soterrado, se pasa al atrio cuya techumbre se apoyaba en pilares de esquina y en ocho columnas de las que quedan parte de sus fustes y basas in situ. 
Sus galerías están pavimentadas con mosaicos romanos bien conservados formando cenefas de varios colores.
El inpluvium o patio central tiene un mosaico que decora una cenefa a tres colores y la fuente de él se halla revestida por mosaicos en la que figuran  anguilas y peces de varios colores. 
Este inplivium comunica con varias dependencias, entre ellas el triclinium la de mayor dimensiones que conserva intacto el pavimento de mosaico de rombos blancos y negros; otra de las dependencias tiene en el centro del pavimento una figura representando a un emperador.
Vista de la domus (casa) en el sótano del palacio
Del nivel visigodo, nada importante que apreciar a excepción de alguna que otra piezas de cerámica- continua Miguel A. Muñoz - aunque a juzgar por las noticias que Abulcasi Tarif Aben Tarique dejó en su obra "Pérdida de España", cuenta que en los últimos años de reinado de D. Rodrigo, el cual tenía el trono en detrimento de sus sobrino D. Sancho y Elier, hijos de su hermano llamado Acosta. 
Se puede apreciar alguna columnas romanas colocada a modo de decoración
D. Rodrigo que quería evitar por todos los medios que los niños reinasen, los tuvo tan vigilados que la madre de los príncipes llamada doña Anagilda junto con los pequeños, dejó la Corte de Toledo viniéndose a Córdoba poniendo su casa y asiento en lo que hoy es este palacio.
Bueno, como bien dice el medievalista Muñoz Vázquez, esto no deja de ser una leyenda... ¡Aunque preciosa verdad!
Torre del Homenaje

Pero sigamos con la historia:

Cuando las huestes llegaron a Córdoba, el Rey Fernando III  para recompensar a estos caballeros hizo un repartimiento entre sus hombres.
Al observar que la parte más vulnerable de la ciudad era el llamado muro de Enmedio que separaba la Medina de la Axerquia... Decidió reforzarla con las casas donadas desde la Puerta del Rincón, calle Alfaros, Capitulares, la que hoy es San Fernando hasta llegar a la Puerta de la Pescadería con la muralla que pasaba paralela al río  y del que parte ha llegado hasta nuestros tiempos.
El caso es que sobre este muro y cerca de las mentadas puertas y portillos tenían edificadas los árabes casas-fortalezas para defensa de la Medina, de cuyas casas sabemos por documento que otorga el rey Fernando III en esta ciudad, al hacer su repartimiento de fecha 1238.

A don Pedro Méndez de Sotomayor y a su hijo Garci Méndez, les dio como casas principales en la ciudad este Palacio para la defensa, según se dice en el documento de donación, de la Puerta Piscatoria o de la Pescadería, que en aquel momento podría tener el aspecto de un castillo como se puede ver en la torres del Homenaje delimitaban- como bien dice Miguel A. Muñoz Vázquez- toda esta edificación en el siglo XIII: 
La muralla de Enmedio de la ciudad y Puerta Piscatoria por el Este; la barrera nombrada hacia 1300 de Fernán Cano, hoy sin salida; el ensanche o adarve que quedaba entre el referido Portillo y el principio de la calle de las Cabezas.
Preciosas vistas del Palacio 
Estos señores se acomodaron en las casas sin hacerle ninguna o muy pocas modificaciones 
pero a medida que la conquista a "Los moros" se fue desinflando, sobre todo a causa de la muerte del rey.
A finales del siglo XIII los señores de los pueblos más adelantados  y distanciados de la ciudad, fueron acomodando sus casas principales en la ciudad, comenzando las luchas de poder entre las familias convirtiéndose en un campo de batalla donde siempre morían, los mismos ¡El pueblo!
Comienzan las luchas entre partidarios de Alfonso X y su hijo Sancho IV quedando la ciudad bajo el dominio del príncipe y de lo que ya hablamos en este blog ( Pincha Aquí
A causa de estas "movidas" los nobles edifican sus casas como auténticos castillos, donde aparecen los estilos mudéjares y gótico- mudéjares...
Por aquel entonces Garci Méndez de Sotomayor, ya era el nieto de uno de los conquistadores de la ciudad del mismo nombre, casó en 1302 con doña Juana Rodríguez de Xódar, hija de Sancho Martínez de Xódar, Adelantado Mayor en la frontera de Córdoba.

Esta señora traía como dote los donadíos, que no son otra cosa que donaciones reales, repartimiento junto a Alcocer, en el lugar que hoy se levanta el pueblo de El Carpio y sus alrededores... pero fue el hijo de éstos quien mandó edificar la Torre - fortaleza que dio origen a aquel pueblo.
Con ocasión de la herencia que tuvo de sus padres la referida doña Urraca Alfonso Fernández de Córdoba, según parece por la carta de testamento que otorgó el mentado don Alfonso Fernández, en Córdoba, a 25 de octubre de 1363, en la que declara: 

"e porque yo el dicho Alfonso Fernández avía fecho una contratación con Garci Méndez a la sazón que casó con Urraca Alfonso mi hija en que yo le di quarenta mil moravedis en cargo de mi tercio e que no hubiese mayoría ninguna que della mando que tomen los dichos Fernán Alfonso e Martín Alfonso mis fijos e fijos de Garci Méndez veinte mili moravedis en que aprecio la mitad destos que les do en cargo de mi tercio"

A la vez que edificaba Garci Méndez de Sotomayor su fortaleza de El Carpio, reedificaba su casa principal de Córdoba. 
La ilustre torre es de planta rectangular su muro occidental que corresponde al muro de la calle Cabezas es de sillares a soga y tizón recordándonos la construcciones árabes y en la fábrica del muro oriental se observa construcción típica mudéjar y las manos del maestro Maesse Mahomad y su yerno el carpintero Yuceff - continua exponiendo D. Miguel Muñoz - en la planta baja sobre su fachada que da a la calle de las Cabezas se halla en su centro la puerta principal, que no es la primitiva, ya que por su forma de construcción como por sus caracteres arquitectónicos pertenecen a la última década del siglo XV.
Fotografía propiedad de Antonio Mérida
Fachada por la calle San Fernando
La primera constancia que se tiene y según Margarita Cabrera en su tesis "Los señores del Carpio en el siglo XV" fue la de D. Luis Méndez de Sotomayor antes del 1400, el cuál tiene dos hijos y dos hijas, heredando el primogénito, un tal Garci Méndez de Sotomayor, fue veinticuatro de Córdoba y participó activamente en las campaña contra los musulmanes, como en Teba y bajo las ordenes de Juan II del que ganó muchas retribuciones:

Fachada de la Calle Cabezas
"Succedió en los heredamientos de su padre en Cordoba. Conquistador de Cordoba, donde logró repartimientos en el Lugar de Alcocer con su padre D. Pedro, su tio Suero Mendez de Sotomayor, y sus primos Ruy Paez de Sotomayor, y Garci Mendez, todos los quales tubieron alli cinco yugadas de repartimiento, año, y vez, con D. Ovieco Garcia, Cavallero muy famoso en las conquistas de este Reyno, succedió en todos estos repartimientos, que constaban de treinta yugadas de tierra con sus Huertas, Higuerales, y Viñas, todas las quales recayeron despues en su neito Garci Mendez de Sotomayor, poblador dela Villa del carpio enmedio de todos estos Donadios, donde se hicieron Dehesas, exidos, Eras, Pozos, y otras divisiones, como todo consta de la citada memoria de Donadios... "
                             (Casa de Cabrera en Córdoba, P. Francisco Ruano )

La falta de descendencia legítima hizo que el señorío fuera heredado por Doña Beatriz de Sotomayor que a punto estuvo de perder el señorío, ya que uno de sus primos se los disputó por ser ella mujer.... ¡ Como siempre! Aunque doña Beatriz tuvo la suerte de tener de su parte a la reina Isabel "La Católica" que la respaldó en sus derechos, y para como hoy se diría "Callarle la boca" a su primo fue de 9.000 ducados de oro y una copa de plata.
Doña Beatriz es quien emparenta con los Haro, nobleza feudal de la corona de Castilla y a su muerte le sucedería su hijo el primer Marqués del Carpio llamado Luis Méndez de Haro.

Pero sigamos con la casa: 
Garci Méndez de Sotomayor, compra en 1487 unas casas que lindan con su palacio, dándole mayor extensión por la parte de su huerta, precisamente de las casas que en 1240 fueron de Domingo Muñoz el Adalid ampliando el palacio.

En la segunda planta se abren dos ventanas pequeñas y un balcón en el centro, tiene este sus jambas y dintel con molduras del gótico aunque está muy reformado. 
Corresponden a esta misma planta por el muro oriental que da al que fue patio de armas, dos ventanas góticas que pertenecen al período de apogeo del estilo; son de ladrillo y sin maineles, éstas se han abierto sobre otras que había más pequeñas, en la actual reedificación del palacio.
Balconada de la fachada de la calle Cabezas
La tercera planta sólo tiene a la fachada de occidente un balcón pequeño con moldura gótica y antepecho del mismo estilo colocado recientemente. Por la parte oriental se abren dos ventanas de arco apuntado con un parteluz o mainel y su tracería es del mismo período de las anteriores. 
Interior del palacio
Interior del palacio
                           
















Un cuarto cuerpo a modo de torre cubierta, fue elevado en tiempos del marqués don Diego López de Haro en 1575 que acomoda toda la vivienda para su casa principal cuando se casó con Ángela de Velasco, al que autoriza el rey Felipe II para tener una guardia permanente de ocho hombres.
El palacio es habitado como vivienda principal hasta que don Luis Méndez de Haro y Sotomayor, VI marqués del Carpio, llega a primer ministro de Felipe IV, tomando residencia en Madrid y dejando abandonado el palacio cordobés. 
Escalera
Hasta que el hijo del valido, D. Gaspar de Haro, se vino para Córdoba en 1648, tal vez para desaparecer un poco de las noches escandalosas que había tenido en la Corte y que se olvidaran un poco la fama que se había ganado ¡Desde luego a pulso! de promiscuo y libertino.

Pero empecemos por el principio:

Este Don Gaspar de Haro y Guzmán era hijo de uno de los hombres más influyentes de la corte de los Habsburgo, valido de Felipe IV,  marqués del Carpio y sobrino  heredero del Conde Duque de Olivares. 
Don Gaspar heredó un afán desmedido por el coleccionismo al igual que su padre y gran mecenas en el arte que podemos apreciar en distintas obras que se encuentran en el Museo del Prado... Pero, centrémonos en lo interesante.
Fue en su juventud un tarambana, se había ganado la fama de golfo desde bien adolescente aunque es a partir de conocer a la corista a la que llaman Damiana cuando sus andanzas fueron "voz populi" en la Corte madrileña.

Por lo visto tenía veintipocos años cuando se echa como amante oficial, a la tal Damiana que según cuentan era de tal belleza que dejaba a todo el mundo encandilado.
Así que según decían que "el marquesito" ¡Muy poco agraciado la criatura! no podía creer que la chica hubiera puesto sus ojos en él... ¡Posiblemente más que él a su faltriquera!
El caso es que fueron muchas noches de locura con la Damiana, en los establecimientos de Madrid que su padre el valido y hasta el propio rey para mediar entre ambos, le recriminó por escrito la vida tan disoluta que llevaba.
¡Lo que leéis, como diría mi abuela, "¡La sartén le dijo al cazo"! 
Estamos hablando de Felipe IV, que fue el tío más promiscuo y adicto al sexo de la historia de los Austrias; dicen que tuvo 46 hijos aunque legítimos uno, enfermizo, tarado y dicen que cruel... Un desastre que consanguinidad consecuencias de la endogamia, el feo y raro Carlos II.

Pero sigamos con la historia:

Así que presionado por su familia para que la dejara no tuvo otra que venirse a Córdoba con ella haciendo vida marital. Unos dicen que al Carpio mientras que otros dicen que se fue al palacio cordobés; teniendo con ella dos retoños: Una niña que murió a los pocos años de nacer al igual que ella en su segundo parto junto con el bebé.

¿Y preguntareis que tiene de especial esta historia? 

Pues que según las últimas teorías, esa Damiana es la famosa "Venus del Espejo" que inmortalizó Velázquez en su cuadro.
Según cuentan, este cuadro pudo ser pintado antes de marcharse en su segundo viaje a Italia el pintor y fue encargo del propio enamorado, es decir el marqués de Eliche, que tenía un gusto muy particular por las obras de contenido erótico.... ¡Ese era el "Don Juan" de aquellos tiempos! ¿Dónde se pintó? ¡Pues posiblemente en Córdoba o en el Carpio!
Por lo visto le costó 150 doblones y le tuvo tanto apego al cuadro que se le llevó cuando el marqués se marchó a Roma.
Después de esta historia... El marqués lo casaron con su prima de apenas quince años Antonia María Luisa de la Cerda Enriquez de Rivera que también murió joven y sin descendencia; casándose de nuevo el marqués con María Teresa Enriquez de Cabrera con la que tuvo una hija a la que llamaron Catalina Méndez de Haro y Enriquez de Cabrera.
Ésta se casó con Francisco Álvarez de Toledo, X duque de Alba de ahí que el Palacio entrara en la Casa de Alba.

Muchas más historias tiene este marqués, como la de encontrarse involucrado en el atentado que sufrió Felipe IV. Os pongo en situación: 

Era un 14 de febrero de 1662
El rey junto a  su familia y la Corte se disponen a ver una obra de Calderón de la Barca, en el teatro Coliseo del Buen Retiro.
Imaginad, todos sentados en los que hoy serian los palcos VIP  cuando unos cuantos cartuchos de pólvora estaban escondidos entre bambalinas para hacer volar el teatro... ¡La casualidad hicieron que no explotara!
Había que buscar de inmediato un chivo espiratorio para este intento de magnicidio y que mejor que el productor de la obra y alcaide del buen retiro: Don Gázpar de Haro y Guzmán, marqués del Carpio y marqués de Eliche.
¡¡Se chupó cárcel y hasta destierro!! 
Hasta su habilitación de nuevo en tiempos del reinado de Carlos II que en compensación lo nombró embajador en Roma y hasta Virrey de Nápoles.
Y es que la muerte de su padre D. Luis de Haro abrió una enorme brecha entre los primos rivalizando por el valimiento del rey y qué mejor que echarle la culpa al que sobraba en el ambiente político que pretendían sus tener sus enemigos


 A mediados del pasado siglo XX se dedicó este Palacio Fortaleza a casa de vecinos, pasando por Cuartel de la Guardia Civil después de la Guerra Civil.
Luego fue adquirido  por el matrimonio vinicultor D. Antonio Herruzo Martos y  Pilar Sotomayor Valenzuela, de ahí que muchos cordobeses conocieran el palacete con "la casa de los Herruzos" fueron los encargados en la rehabilitación del palacio.


*Editada para ampliación 2016
*Editada para fotos nuevas 2019


Fuentes consultadas:
El palacio de los marqueses del Carpio por Miguel Muñoz Vázquez Boletín de la Real Academia de Córdoba de Ciencias, Nobles Letras y Bellas Artes de 1961-Nobleza de Andalucia por Gonzalo Argote de Molina-Casa de Cabrera en Córdoba: obra genealógica histórica, dedicada a el señor escrito por Francisco Ruano, Joannes Ribadas-El señorío del Carpio en el siglo XV por Margarita Cabrera * Reportaje del palacio de los marqueses del Carpio en Córdoba ABC Blanco y negro 1999- La arquitectura domestica en Córdoba en Cervantes virtual-La pólvora, el veneno y los esclavos: El atentado de 1662 en el Buen Retiro y el fin de la carrera política de don Gaspar de Haro en la Corte por Alberto Martin Monge * Universidad Complutensen de Madrid