En tres tiempos se divide la vida: En presente, pasado y futuro; de éstos el presente es brevísimo, el futuro dudoso y el pasado cierto... (Lucio Anneo Séneca)

martes, 31 de enero de 2012

Abd al Malik inb Yahwar

 Y como perdió la Taifa cordobesa








Su ascenso al poder se produjo de la mano de su padre, Abu al Walib segundo soberano de la dinastía Banu Yahwar aristócratas cordobeses que habían trabajado como visires de los propios Omeyas.
Abu l- Walid, que así se llamaba su padre, estaba débil de salud y nombró a sus dos hijos, Abderramán y Abd al Malik, para ayudarse de ellos en las tareas de gobierno.
Dándole al primero el poder en los asuntos financieros y al segundo llevaría las riendas militares.
Enfermo Abu l Walid se retira y es sucedido en 1063 por Abd al Malik, a pesar de no ser el primogénito... 
Sin embargo movido por su ambición, Abd al Malik apartó a su hermano Abderramán y lo recluyó en su casa, convirtiéndose en el hombre fuerte del régimen y con esto tambaleándose la república; que para enfrentarse a su hermano apeló al rey de Sevilla Abbad II al Mutadid.
Esta alianza hizo que el Emir de Toledo llamado Al Mamun desconfiara de ambos poniendo los ojos en Córdoba.

Mientras:

Abd al Malik trató de emular a los antiguos Califas adoptando títulos similares a ellos como "El victorioso por Dios" e incluso se atrevió a rezar en el recinto especial de la Masura de la Mezquita de Córdoba reservada a los soberanos Omeya.
Esto le ocasionó una gran impopularidad que acompañado con la confiscación de bienes que le hizo a los cordobeses para pagar a su ejercito, añadida todo esto a una conducta tiránica...
Aunque su fin no vino precisamente de los cordobeses, la ocasión vino dada por el ataque de Al Mamun de Toledo que cercó la ciudad. 
De nuevo Abd al Malik pide auxilio a Sevilla, aunque en aquel momento el Emir sevillano no se encontraba en su mejor momento, ya que al poco tiempo murió, le envió mil trecientos hombres. 
Aunque el sitio duró tanto que Al Mutamid sucedió a su padre el emir sevillano en 1069 tardando en derrotar al toledano un año; y esta vez en vez de liberar a Córdoba la anexionó a su propia Taifa.

Cuentan que Abd al Malik, trató de refugiarse en el Alcázar, donde fue cercado rindiéndose sin mucha resistencia mientras su padre, Abu l- Walid al Rasid, quien al parecer se encontraba enfermo de hemiplejia, se escondió con sus harem en la masura de la Mezquita, siendo capturado por las fuerzas cristianas que actuaban al servicio de los abbadíes, quienes los despojaron de sus bienes.

En 1070, al Mutamid de Sevilla tomó posesión de Córdoba que encantados acogieron al Emir y encantado cantó en sus excelentes versos  "sus desposorios" con la bella ciudad; que aún perdió brevemente por el levantamiento de un tal Hakam Ibn Ukasa, caid de un castillo cercano a la ciudad se levantó contra el sevillano proclamando soberano a al Mamun de Toledo, el cual tomó posesión de su anhelada presa y allí murió probablemente envenenado, a los seis meses.
Al Mutamid de Sevilla recuperó Córdoba, hizo sacrificar a Ukasa y designó gobernador a su hijo al Faht, el que murió combatiendo contra los Almorávides... 
Su viuda huyó a refugiarse junto a Alfonso VI, que tuvo con ella a su hijo Sancho.
La belleza de esta mujer y las relaciones que mantuvo con el rey castellano dieron origen a la leyenda de la denominada "Mora Zaida".

Pero eso, déjame que te lo cuente otro día.

Fuentes Consultadas:
Los reinos de Taifas. Al-Andalus en el siglo XI", en Historia de España por Menéndez Pidal vol. VIII-I. Madrid, Espasa Calpe, 1994.- Reflexiones sobre Qurtuba en el siglo XXI, de la conquista musulmana y la conquista cristiana por Pierre Guichard- El Islam de Al Andalus de Miguel Cruz Hernández- Crónicas de la provincia de Córdoba por Manuel Gonzalez Llanas- Academia de la Historia por Alejandro Garcia Sanjuan- Foto recogida de Internet no tiene nada que ver con el personaje-

martes, 24 de enero de 2012

Leyenda de la calleja del Toril








Corría el siglo XVI cuando en nuestra ciudad se distinguía entre la gente de vida libertina y relajada D. Clemente de Cáceres.
Éste se entregaba a continuos galanteos y amoríos sin importarle arrollar todo lo que se oponía al logro de sus deseos...


Las mujeres le temían, los maridos le odiaban y los padres hierros ponían en las ventanas, temerosos que a sus hijas pudiera ser deshonradas por este miserable.
Alardeaba de mujeres que habían caído a sus pies ya fueran solteras, casadas o viudas. Y las apuestas corrían entre sus amigos a ver que señora caía esta vez en sus redes. 
Muchas fueron las personas ofendidas por sus frivolidades y se hizo de muchos enemigos en la ciudad, profesándole el odio más encarnizado aguardando la ocasión para poder vengarse.

Una noche, de las muchas que salía en busca de conquista, iba por la plaza Cedaceros dirección a la calle del Toril sin escuchar más ruido que el roce de sus armas con su ropa, cuando advirtió dos embozados de larga capa que al parecer salieron de la calle Juramento.
Cuando ya se había adentrado en el Toril, se oyó un silbido y de pronto aparecieron dos hombres que entraron al Toril por la Plaza de la Almagra... 
Comprendiendo don Clemente que se trataba de una emboscada, aceleró el paso para salir por la plaza Corredera sin saber que allí mismo le esperaban dos embozados más.
Calleja del Toril
Calleja del Toril























Plegaria a la Virgen que se encuentra
encima del arco
Eran seis los hombres armados que acechaban al joven y sin salida se arrinconó en el quicio de la puerta de la Ermita.
Allí mismo se preparó don Clemente, que sacando su espada se dispuso a vender su vida a cambio de matar a cuantos pudiera... ¡No le quedaba otra! En sus oídos se agolparon los latidos de su corazón acelerado, los minutos se hicieron horas y su vida pasó ante sus ojos... Una vida llena de todos los agravios que había cometido. Mientras, la luz de la luna se encargaba de dar el brillo a los seis aceros que se preparaban a hundir sus puntas en su pecho.
Apoyando su espalda en una puerta que caía a la Ermita de los Ángeles, en el mismo callejón y viendo su muerte segura, gritó:

"Ven en mi socorro, Madre del alma" 

Acordándose de la pequeña imagen que tantas veces había visto al pasar sin prestarle atención...

La puerta de la Ermita se abrió por arte de magia cayendo de espaldas dentro... A la vez, sin saber como ni por qué la puerta se cerró en el momento en que las seis espadas, al unísono, se iban a clavar en su torso, clavándose en la puerta.
Quedó solo en la Ermita, mientras sus asesinos quedaron en la calleja que al encontrarse burlados intentaron abrir la puerta...Una vez forzada y abierta vieron que la hermosa imagen lo amparaba con su manto.
Nada hicieron ya, estaba acogido en sagrado, bajo la protección de la iglesia.
Ermita dela Virgen del  Socorro
El libertino joven don Clemente de Cáceres, viendo lo que había ocurrido y que la Virgen le había dado una oportunidad de cambiar, convirtió esa vida licenciosa por la de un hombre honrado.
Fundando la hermandad de Nuestra Señora del Socorro en Córdoba, siendo uno de los más fervorosos cofrades.



Fuentes Consultadas:
(Entrada editada para modificar fotos 08/08/2018)
Documentada en Paseos por Córdoba en texto de Ramírez de Arellano- Óleo de Lorenzo Valdés- demás fotografías propiedad del blog las cuales he puesto señal de agua por verlas que otros las han copiado sin indicar de donde las han cogido.

jueves, 12 de enero de 2012

Las cuentas pendientes de Sancho I con Abderraman III




El día que a Sancho le llegó la noticia de la muerte del gran Califa Abderraman III, sintió la liberación de la palabra que todavía no había cumplido... 
Ya no le tendría que ceder las diez plazas en la frontera del Duero, que tantas largas le había dado a los requerimientos del moro, a pesar que tanto él como su abuela, la reina Toda de Pamplona lo habían pactado en Córdoba durante su cura de obesidad y de la que ya te conté.
Muy pronto se le olvidó a Sancho "el gordo" que el cordobés era el que le había devuelto el trono del que los nobles leoneses lo había echado y que perdió por no poder defendedlo a causa de su mal estado físico.

Poco tiempo pasó cuando en tierras leonesa llegó una comitiva desde tierras cordobesas entre los que se contaba con el cadí de Valencia, Abd al-Rahmán ibn Djahhaf y el de Guadalajara llamado Aiyub ibn al-Hussain en nombre del nuevo Califa Al Hakam II, hijo de Abderraman III.
La comitiva llevaba el requerimiento del pago que en su día pactó el rey leones junto con su abuela doña Toda, reina de Pamplona, con su padre el gran Califa.
Sancho que en aquellos momentos se encontraba fuerte y respaldado por Navarra le negó al cordobés la entrega de las plazas que exigía lo pactado a pesar que para muchos eso sería un suicidio...

Mientras, Ordoño IV destronado y fuera de las tierras leonesas y de Asturias donde se había ocultado por un tiempo, marcha a tierras castellanas para pedirle refugio al conde Fernán González, su suegro que a pesar que había intrigado para ponerlo frente al trono de León no quería saber nada de él, sólo recogió a su hija y nietos. Ordoño no tuvo más remedio que encaminarse hacía Córdoba para pedir ayuda...

A al Hakam le vino como anillo al dedo que Ordoño IV "el malo" llegara a Córdoba pidiendo asilo y rindiendo vasallaje ¡A cambio! le pedía apoyo al cordobés para su causa que no era otra que querer derrocar de nuevo a su primo Sancho I del trono. 
El Califa solo tuvo que esperar que la noticia de la llegada de su Ordoño a su corte le llegara a Sancho que vio su trono peligrar pues sabía que igual que que lo habían puesto a él donde estaba, lo podrían hacer con su primo... ¡Le llegó el pánico!
Y tal vez aconsejado por su abuela doña Toda que era mucho más astuta y maquiavélica que él, buscó tiempo suficiente ante el cordobés para poder jugar una ultima carta que aún tenía guardada.

No tardó para enviar una embajada cristiana a Córdoba en los que hasta figuraban varios prelados como el de Zamora y el de Galicia que en nombre de Sancho I rey de León se le ofrecía sumisión al cordobés.
Al Hakam II aceptó la tregua a cambio de que Sancho ordenara demoler todas las fortalezas que existieran en la frontera que colindaban con los territorios musulmanes, aunque no llegó a materializarse el trato pues curiosamente Ordoño IV que cae enfermo y en pocos días muere en Córdoba... Dicen las malas lenguas que envenenado por alguien a las ordenes del leonés.
Sancho, sabiendo que había muerto el que podría usurparle su trono, de nuevo se le olvida lo pactado con Al Hakam, aliándose esta vez con Castilla, Navarra y el condado de Barcelona con Borrel y Mirón para ir contra el Califa.

Enterado el Califa de este convenio responde con una expedición dirigida por él en persona contra la frontera castellana que le permite apoderarse de las plazas de San Esteban de Gomaz, Atienza y Calahorra lo que le obligó a los cristianos a pedir la paz al Califa




Dos años después en el curso de una rebelión de varios de sus súbditos de Galicia, Sancho I sometió a Sisnando en Compostela y cruzó el rio Miño siguiendo al conde Gonzalo Sánchez quien temeroso del ejercito que traía Sancho fingió someterse y solicitó del monarca una entrevista donde pactó con el leonés sometimiento. Mostrándose el conde agradecido le ofreció una fruta que estaba envenenada y apenas la había comido comenzó a sentir los efectos mortíferos del veneno... El rey quiso que lo llevaran a León aunque a los tres días de camino murió en el Monasterio de Castrelo del Miño y así terminó el rey cuyo cuerpo fue llevado a León y enterrado en la iglesia de San Salvador donde estaba enterrado su padre.

Acarreando con su muerte graves problemas a León ya que su hijo Ramiro III solo contaba con cinco años teniendo que establecer una regencia a cargo de su tía la monja doña Elvira.
Coincidencias de la vida también el califa Al Hakam II tuvo los mismos problemas sucesorios a su muerte.

Pero eso, déjame que te lo cuente otro día.



Fuentes consultadas: 
Historia General de España y sus indias desde tiempos remotos hasta nuestros días de Victor Gebhardh volumen - Andanzas por la vieja España escrito por Julio Alemparte- Historia de España antigua y media de Luis Suárez Fernández- Historia de España- Wikipedia-El condado de Castilla, 711-1038: la historia frente a la la leyenda, Volumen 1 escrito por Gonzalo Martínez Díez

jueves, 5 de enero de 2012

Las dos modelos de "Carcelera" de Julio Romero de Torres


En 1929 el periodista D. Alfonso Camín, le hizo una entrevista a D. Julio Romero de Torres para la revista "Generación Consciente" y Camín le pregunta:
¿Qué le gusta a usted más, después de la pintura?
El pintor no dudó y respondió:
El cante Jondo...
¿Más que la misma pintura?
Mis cuadros no son otra cosa nada más que motivos del cante jondo... Un símbolo de cada copla.
Mire usted, yo daría mi nombre y mi arte por el nombre y arte de Juan Breva, el mejor cantaor de cante jondo que ha tenido la raza.

Yo canto coplas de amores.
Yo canto a Julio Romero,
entre los grandes pintores.
Mi canción es flor de amor
espera el hombre que yo quiero.
Por quererme le ofendieron,
no supieron comprender.
Encendieron y encendieron
su querer y mi querer

Yo seré tu carcelera.
Prisionero tu has de ser.
Y siendo tu carcelera,
cadenas me has de poner,
que quiero ser prisionera,
ser prisionera de tu querer.

Canción Andaluza inspirada en el célebre cuadro de Julio Romero de Torres
Letra: Juan Soca   Música: Francisco Alonso

La carcelera es una modalidad de toná, se canta sin acompañamiento y es cante de hondo sentimiento y sus letras aluden a prisiones.
Si el pintor simbolizaba en su obra el cante, sin duda en "La Carcelera" trasmite el "quejio", un llanto roto a la ausencia.
La protagonista enlutada apoyada con dejadez sobre una guitarra y un pañuelo blanco, su rostro refleja el haber llorado, en un segundo plano, entre barrotes, aparece el preso, abandonado a su dolor.
La Carcelera  1918-1919
Expuesto en Sala Majestic Hall de Bilbao
Modelo Conchita Castillo
Colección Privada en Italia
El óleo fue expuesto en la sala Majestic Hall de Bilbao 1919 en la primera exposición individual del artista.
La cordobesa Conchita Castillo de la que ya hablamos en una entrada anterior, posa con sentida expresión de tristeza, el lienzo trasmite la soledad de los protagonistas... Ella, sentada y con un pañuelo en su regazo apoyada en la guitarra, detrás el preso en el abandono de la angustia.
Tanto éxito tuvo esta bella obra, que hasta en una comedia teatral de Antonio Quintero y Pascual Guillen titulada "Comedia flamenca" fue dedicada a D. Julio Romero produciendo en su segundo acto el cuadro de la Carcelera en forma de alegoría.
El pintor realizó una segunda versión de "La Carcelera" para el que posó Asunción Lledó, actriz de teatro que en aquellos tiempos tuvo cierto renombre. Con la variante de que ha sido la única modela que el pintor pinta con pelo rizado... 
La otra Carcelera
Expuesto en la Galeria Witcomb, Buenos Aires
Modelo Asunción Lledó
Se desconoce su paradero
Buscando por Internet quien era  Asunción Lledó encontré a un señor que estaba a su vez, buscando una fotografía del cuadro de la Carcelera en el que la modelo era Doña Asunción, había dejado un comentario en una página de un marchante de arte y éste no le había comentado. 
Ni corta ni perezosa, como se suele decir, me puse en contacto con él para decirle que yo tenía una fotografía de ese cuadro pero que desconocía su paradero... A cambio sólo le pedía que me diera información de la artista.  
Éste señor tuvo la amabilidad de ponerme en contacto con un amigo de la familia de la modelo que casualidad, también es pintor, le comenté que estaba buscando información sobre esta señora y me dijo que conocía a su hija, que ya era muy mayor pero me adjuntaba esta bella fotografía de otro cuadro de Julio Romero de Torres de la que también fue modelo.
Fotografía propiedad de ELPERIODIC.COM
Fotografía de Asunción Lledó
Asunción Lledó Martinez nació en la localidad alicantina de Crevillent un 4 de octubre de 1890, de familia humilde destacó pronto con una voz privilegiada se marchó a Madrid a buscar fortuna debutando en los mejores salas de Madrid.
El 19 de Agosto de 1917 aparece en el teatro Reina Victoria como actriz de Opereta, el 20 de Junio de 1922 celebraba en el mismo teatro su primer aniversario como tiple, apareciendo una reseña en el diario ABC en la que dice que  tenía una voz agradable y bien timbrada había llegado a los primeros puestos entre las tiples...
La obra se titulaba  " El Príncipe se casa" y al final del segundo acto ella cantaba la barcarola titulada "La mujer ideal", por aquel entonces ya la habría pintado D. Julio Romero de Torres. 
Fue nombrada hija predilecta de su ciudad en 1922.
Aunque aparece en varios periódicos de la época con espectáculos de cierto renombre...  
El 1 de febrero de 1925 estrenaba en el Alkazar de Madrid, junto con otros actores, la Opereta "Madame Pompadour" de Leo Fall con adaptación de Castillo y Cárdenas.
También estrenó un entremés de D. Jacinto Benavente titulado "El suicidio de Lucerito" 
Siete meses después aparece en una  Función Benéfica que se dio en Madrid para aliviar la situación económica del tenor llamado D´Angelo Masini, junto con compañeros como Pepe Moncayo
En noviembre de 1933 aparece una entrevista de Juati de Sarto  junto con otras dos actrices, Carmen Caballero y Angelita Palencia, en una entrevista de Blanco y Negro en le preguntaban a las tres que cuando había sido su primer desengaño amoroso:
La declaración de la Lledó, fue corta y concisa:
¿Cuándo?- Le pregunta el periodista
- No lo recuerdo.
- ¿Por qué? Le sigue preguntando
- Por ser yo demasiado buena. Se lo digo de esta manera por no decir claramente que era un canallita...
Falleció en Madrid el 22 mayo de 1936
Judith. 1922
Expuesto en  la Galería Witcomb, Buenos Aires
Modelo Asunción Lledó
Se desconoce su paradero
En este cuadro con un puñal que esconde entre sus brazos, a modo de las heroínas del Antiguo Testamento.
Ambos cuadros aparecen junto con otras veinticinco obras, en la exposición del pintor presentada por el marchante Justo Bou en la última semana de agosto de ese mismo año en la galería Witcomb de Buenos Aires.
Ese mismo día, en el diario argentino La Prensa, ya insinuaba que pinturas como "Celos" y "La Carcelera", debían ser disfrutadas como auténticas coplas populares.


Los cuadros fueron vendido en Buenos Aires y nada más se sabe, habrá que esperar a que de nuevo salga a la venta algún día.

*Nota informativa:
He tenido la enorme suerte de contactar con un amigo de la Familia Lledó que ha sido tan amable de darme información y fotos de esta bella mujer.
Le estoy muy agradecida


*Editado para ampliación Agosto 2020

Fuentes consultadas: 
Mercedes Valverde Candil. Catalogo Oficial del Museo Julio Romero de Torres- El Flamenco y Julio Romero de Torres, una pasión- Las escenas madrileñas entre 1926 y 1931: Un lustro de transición- ABC 22/6/1922- 18/7/1925- Blanco y Negro Madrid 1/02/1925 página 71.-Blanco y Negro Madrid 18 de noviembre 1933 página 114-