El Pecado ( 1913 ) Óleo y Temple sobre lienzo 185 x 202 cm Museo de Julio Romero de Torres Córdoba |
Obra complementaria de "La Gracia" del gran pintor simbolista Julio Romero de Torres es la titulada "El pecado" la mujer se hace presente a través de este soberbio desnudo de espaldas al espectador contemplándose en un espejo y solamente ataviada con un collar de coral.
Esta postura nos hace recordar el cuadro de Velázquez titulado "La venus del espejo" sobre todo porque Don Julio repite la incorrección de la postura reflejada en el espejo; en éste la mujer se muestra indiferente recostada en un diván que está vestido con ricas sábanas de encaje, mientras cuatro ancianas la rodean.
La obra, evidentemente, está cargada de sensualidad y simbolismo...
Desde las rosas que se encuentran a los pies de la joven, que son emblema del amor
Pero también efímeras que se marchitan con el tiempo, al igual que la belleza, y no son rojas como podríamos pensar, son rosas lo que simboliza la ausencia de maldad, de doble intención, haciendo señalar la inocencia de la joven.
Las ancianas, dos de ellas cuchichean entre ellas, mientras que con sus dedos parecen que están contando...
Aunque mostrar los dedos tienen diferentes significados y el dedo indice es el que se justifica nuestras acciones, al igual que representa nuestro juicio ya que es el dedo con el que se acusa a los demás.
Mientras, una de las tres ancianas vestidas de negro sujeta el espejo mientras fija su mirada en el espectador, absorta de lo que hablan las otras dos.
El espejo es la feminidad era continua fascinación para la propia mujer ya que era su único contacto con la realidad. En el caso de El pecado, es sinónimo de coquetería femenina y la vanidad.
Hacia la izquierda según estás frente al cuadro hay otra mujer, la modelo es Carmen Casena que le ofrece una manzana a la joven... La manzana es el pecado
Pero si nos fijamos es una manzana dorada, la manzana de la discordia que según la mitología griega la diosa Eris encendió la discordia entre Hera, Afrodita y Atenea.
No es la primera vez que hace esta alusión a la manzana en su obra Julio Romero de Torres, pues lo hace en "El retablo de amor".
Y en el suelo , los zapatos, que simbolizan las bajezas terrenales, los instintos ocultos... Pero los zapatos son también un símbolo de lo femenino, de la elegancia.y el detalle y el lujo del raso de seda , son representativos de elegancia, un signo sofisticado de la moda de su tiempo. El pintor los utilizó como un complemento erótico cargado de fetichismo.
Julio Romero cultivó el sueño pictórico de buscar nuevos horizontes para la pintura pero sin desligarse de ciertos asideros.
El cuadro fue presentado junto a "Poema a Córdoba" en la exposición Nacional de Madrid de 1915 donde el pintor pudo escoger una sala donde exponer en solitario quince obras con la condición de no optar a la medalla.
Tuvo tal acogida que el estado compró este cuadro y que afortunadamente lo tenemos cedido a la ciudad para deleite de todos los cordobeses.
Fuentes consultadas:
Documentada en Museo Julio Romero de Torres-Julio Romero de Torres en la colección Deering de Sitges: su relación con Miguel Utrillo y el mundo artístico catalán Sebastià Sánchez Sauleda Universitat de Barcelona- El significado de las rosas- Diccionario de los símbolos, Jean Chevalier-Charles Deering Y Ramón Casas: escrito por Isabel Coll Mirabent (pag bch)-
2 comentarios:
Está haciendo un buen trabajo dando a conocer su ciudad.
Un saludo Piconera
Muchas gracias Amador.
Un saludo y bienvenido
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