sábado, 17 de septiembre de 2011

Martin López de Córdoba un caballero de D. Pedro "Cruel"





La pugna que sostuvieron el Rey de Castilla don Pedro I y su hermanastro Enrique de Trastámara fue un enfrentamiento fratricida por la disputa de un trono.
La guerra castellana proseguía de forma cada vez más terrible, muchos miembros de la nobleza se sumaron al bando del futuro vencedor teniendo asegurado, desde el primer momento, la conservación de sus bienes e influencia; otros supieron ver a tiempo la profunda fosa a la que se encaminaba el Rey legitimo y cambiaron de bando oportunamente, cuando parecía seguro el triunfo del pretendiente. 
Finalmente, un grupo nada escaso de ellos persistieron en su fidelidad al rey D. Pedro I como es el caso de los López de Córdoba.
Según afirma L de Castro y Salazar- D. Martín López de Córdoba fue bisnieto de uno de los conquistadores de Córdoba, un tal Muñoz Martín hermano del conocido adalid Domingo Muñoz. Hijo de Pascual López de Córdoba y doña Leonor Sánchez Manuel sobrina de D. Juan Manuel, príncipe de Villena ¡Que sí... ese que estáis pensando, el autor del Conde Lucanor!
Bueno, al caso:
La presencia de Martín López de Córdoba en la Corte de D. Pedro empezó siendo mínima como camarero del Rey a participar de manera destacada, en algunas de las operaciones militares dirigidas contra Aragón. 
Así que Pedro I decidió recompensar su fidelidad concediéndole, en concepto de señorío la villa de Monturque que junto con Montilla y Aguilar había formado parte del señorío perteneciente hasta unos años antes a Alfonso Fernández Coronel que fue ajusticiado por rebeldía al monarca pasando sus tierras a la Corona. Pero eso déjame que lo cuente otro día.

En 1359, el monarca le otorga también en tierras de Córdoba y como señorío, la heredad o aldea de Cascajar que a partir de ese momento pasó a llamarse Villafranca.
Tres años más tarde, el Rey le hizo donación de todos los bienes de Alfonso Fernández Coronel había poseído en esta última ciudad como en Córdoba, así como de las aceñas denominadas del "Adalid" también ubicadas en Córdoba y la Torre de Argamasilla, que había pertenecido anteriormente a Alvar Pérez de Guzmán.
En 1364 y por orden del rey, acompañado de 2.000 jinetes causó graves daños a las tropas aragonesas... Poco tiempo después el monarca en agradecimiento a sus servicios le encomendó el maestrazgo de la orden de Alcántara, que había quedado vacante tras la muerte del anterior maestre. 
Pese a todo y antes de ser nombrado maestre de Alcántara, Martín López de Córdoba contrajo matrimonio con Sancha Carrillo; de este matrimonio nacieron Álvaro y Leonor. 
El primero fue fray Álvaro de Córdoba, un personaje muy famoso de la historia religiosa de la ciudad llegó a ser confesor de la reina Catalina de Lancáster. 
Su hija a la que como hemos dicho se llamó Leonor, fue valida de la reina y pasó a la historia como una de las primeras mujeres escritoras. Pero de eso déjame que lo cuente otro día
Fuera del matrimonio tuvo al menos otro hijo llamado Lope López de Haro, con una ilustre dama hija de D. Alvar Diaz llamada Teresa Alvarez de Haro que la mantuvo como amante durante su matrimonio, después de que muriera su esposa y él ingresara en la orden de Alcantara.


La guerra civil proseguía dando lugar a la división del reino en dos bandos que empezaron a ser irreconciliables.
Córdoba, abrazó en gran parte la causa del pretendiente con una lucha encarnizada contra Don Pedro que envió a D. Martín a Córdoba, su tierra natal, con la orden de eliminar a algunos miembros de la nobleza de la ciudad que habían abrazado la causa de D. Enrique de Trastámara, ordenando cortarle la cabeza, entre otros, a D. Gonzalo Fernández de Córdoba, D. Alfonso señor de Monturque, D. Diego Fernández, Aguacíl mayor...
Batalla de Nájera
Sin embargo la ejecución no se llevó nunca a cabo porque el Maestre no sólo no cumplió el mandato regio sino que puso en conocimiento de los interesados la rotunda resolución del Rey dándoles la ocasión de huir.   

Cuando Pedro el Cruel se enteró de lo sucedido, se puso en contacto con Pedro Girón, comendador de Martos y le prometió nombrarlo Maestre de Calatrava si encarcelaba a D. Martín que poco a poco fue recobrando el favor regio de nuevo, ya que jugó un papel fundamental como embajador del Rey en Inglaterra, donde viajó para entrevistarse con Eduardo III con el fin de que el inglés prohibiera a sus súbditos aliarse a la causa del Trastámara...
D. Martín encuentra apoyo en Eduardo III ya que ve una esplendida oportunidad de ir de una manera indirecta contra Francia. Si ellos apoyaban al Cruel para mantener su corona en Castilla, éste en agradecimiento no tendría ningún tipo de alianza con Francia durante su reinado. 
Así que le suministró armas y hombres, entrando en batalla contra D. Enrique un ejercito anglo-castellano en Nájera en 1367.
Pero D. Pedro no pagó a los ingleses y molesto el príncipe inglés de que no había pagado la campaña y enterado de la forma sanguinaria que "El Cruel" tomaba venganza en sus prisioneros, decide romper la alianza con el castellano y abandonar la península dejando a D. Pedro con un palmo de narices...

Representación de la Batalla de Montiel


En marzo de 1369, cuando tuvo lugar el cerco de Pedro I en Montiel, el Maestre se encontraba en Baeza donde había llegado provisto de tropas y dispuesto a auxiliar al Rey.
Consumada la tragedia de Montiel donde D. Pedro fue acorralado y asesinado por su propio medio Hermano D. Enrique de Trastámara.
D. Martín se refugió en Carmona, se apoderó de los alcázares y se encargó de la custodia del tesoro real y de los hijos del monarca. 
Allí permaneció al amparo de sus murallas durante el cerco al que fue sometida la villa, que duró más de un año.

Poco después iniciando entonces sus gestiones con los habitantes de Carmona para que reconocieran por Rey a uno de los hijos del difunto. Insistiendo que sus protegidos tenían más derecho a la corona que el bastardo de D. Enrique y sostenía que algunos de éstos eran legítimos ya que Pedro I, después de muerta doña María de Padilla, se había casado con la madre de ellos, argumento más que problemático. 

En 1371 pactó con el Trastámara la entrega de la plaza, a cambio de que el nuevo Rey respetase sus vidas... Sin embargo, el monarca no cumplió su promesa y D. Martín López de Córdoba fue quemado en una hoguera en Sevilla después de serle amputadas las manos y los pies.

Todos sus bienes fueron confiscados, entre ellos los señoríos de Monturque y Villafranca. 
El primero de ellos fue entregado por Enrique II en 1370 a Gonzalo Fernández de Córdoba, III señor de Cañete y fiel partidario de la causa de este último, mientras que el señorío de Villafranca, terminó por formar parte de la orden de Calatrava.
Esta es la vida de un caballero que estuvo a la alturas de las circunstancias pero en el bando equivocado.
D. Martín López de Córdoba se encuentra enterrado en la iglesia de San Pablo en Córdoba






*Editado para colocar fotografía lápida  en Enero de 2012





Fuentes Consultadas:
El destino de la nobleza petrista: La familia del maestre Martín López de Córdoba por Margarita Cabrera Sánchez* Universidad de Córdoba-  Martin López de Cordoba por Covadonga vadaliso Casanova *Real Academia de la Historia- Genealogista Luis de Cartro y Salazar- Crónicas de los reyes de Castilla de Pero López de Ayala de J. J. Fabregat, Antonio Carnicero, Jerónimo Zurita- Wikipedía- Foto recogida de Internet


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