jueves, 24 de septiembre de 2009

El Palacio de Viana

Un chasco por una herencia y un presunto asesinato.
Fachada principal del Palacio





Situado en la el corazón de Santa Marina aparece uno de los muchos palacios que existen en Córdoba.
El Palacio de Viana, se llama así desde 1949 por ser el titulo que ostentaban los últimos propietarios, antes se llamó de los marqueses de Villaseca, aunque en un principio se llamó las casas de Don Gome, más tarde la casa de la rejas de Don Gome...
Pero empecemos por el principio:

El reinado de Fernando III fue decisivo para el renacer de una nueva nobleza que empieza a despuntar gracias a su colaboración y las donaciones del Rey; como se puede observar en la mayoría de las casas nobiliarias. Luego, entre donaciones y compras, se van haciendo sus mayorazgos pasando luego, en algunos casos, a títulos.

En el caso de este palacio han sido muchos los propietarios de éste; por lo visto el primer señor que dispuso de un núcleo de casas allí hasta llegar a lo que hoy en día es el Palacio. Pasan por innumerables genealogía de apellidos importantes en Córdoba.
Como bien dice D. Fernando Moreno Cuadro en su trabajo "Origen de las casas principales del señorío de Fuencubierta" dice:
Que Ruy Fernández de Córdoba que casó con la primogénita por varonía legítima de los Marqueses de Villaseca, doña Teresa Suarez de Figueroa y que éste tal Ruy fue el primer señor de Fuencubierta, veinticuatro de la ciudad y Alcaide de Antequera.
Fue el que inició la compra de varias casa en la collación de Santa Marina.

"compra de las casas del mayorazgo de los Córdoba por 750 doblas/ año de 1425, cómprolas Ruy Fernández, hermano de Diego Fernández señor de Aguilar, de la mujer de Gonzalo Mexias comendador de Segura, doña Teresa Carrillo"

Ampliaciones del palacio
Antes de seguir, tengo que decir que en la web del palacio de Viana dividen en cuatro etapas los propietarios del palacio ¿Por qué? Pues porque cambian de apellidos y títulos a causa de no tener descendencia directa, testan a favor de esposas o sobrinos, que ya no llevan los mismos apellidos.
Empiezan con la etapa de los Figueroa y Córdoba, después llegan los Fernández de Mesa, luego los Cabrera y finalmente los Saavedra y estos sí que nada tenían que ver con el origen... ¡Pero ya lo contaremos!
Sigamos con la primera etapa que los Figueroa y Córdoba:
Las casa le dieron entrada en aquel momento por lo que hoy conocemos como la reja de Don Gome ya que la anterior propietaria la había cerrado y sus dimensiones serían lo que hoy sería el patio de recibo, el patio de Archivo y el patio de los Naranjos
Del matrimonio de D. Ruy y doña Teresa nació Gómez Suarez de Figueroa y Córdoba que fundó mayorazgo sobre estas casas en 1492. (Gómez, Gome... Tal vez del nombre de este propietario viene el nombre de la reja) 
Bueno, sigamos:
Las casas se fueron ampliando por compras y permutas hasta la muerte de Don Gómez que al morir sin descendencia testó en su sobrino Bernardino de Figueroa y Córdoba ¡Anda que ponerle Bernardino al pobre hombre, no se salvaban de nombres feos ni los ricos! 
D. Bernardino se caso con María de Villaseca enlazando con la casa Villaseca.
De éste enlace nació Gómez de Figueroa y Córdoba primer señor de Villaseca que se encargó de comprar varias casas más en 1545 y es donde hoy se ubica el "Patio de los gatos"
Pero no es hasta el segundo señor de Villaseca D. Luis Gómez de Figueroa y Córdoba cuando se configura el "Patio del Recibo" siendo el tercer señor de Villaseca cuando se realiza el "Patio de las Rejas"
Pero al llegar al primer marqués de Villaseca por merced de Felipe V, el primer Borbón que entró en España, Gómez Fernández de Córdoba y Figueroa muere sin descendencia...
Al no tener hermanos varones hereda el marquesado su hermana Paula que al casarse con un Fernández de Mesa y Argote cambia el apellido del marquesado por matrimonio y es aquí comienza la segunda etapa.
Para no hacerlo muy largo pasa por sucesión hasta por un Dean de la Catedral que renuncia en un hermano...
Hasta llegar a Ana Rafaela Fernández de Mesa y Argote responsable directa de muchas de las reformas del palacio en el siglo XVIII. Crea las dependencias del Archivo y se empieza a recopilar éste que es una de las joyas de la documentación nobiliaria de España, al igual que remodela el patio del archivo y el patio de la madama.
Es de nuevo por casamiento cuando el marquesado de Villaseca se une con el condado de Villanueva de Cárdenas  entrando así en la tercera etapa.
Cuatro representantes que fueron ampliando el palacio, en 1814 el VII marqués de Villaseca incorpora las casas de los condes de Torres Cabrera, que lindaban con el Palacio permutándolas  con un cortijo de su propiedad y duplicando las extensión del palacio entre lo que se encuentran "el Jardín" y los patios de la Alberca, el Pozo, los Jardineros, la Capilla y la Cancela. 

¡ Y aquí es donde viene algo bastante jugoso como para pasarlo por alto!

El noveno marqués de Villaseca, Juan Bautista de Cabrera y Bernuy, último propietario que ostenta este título, muere sin descendencia dejando como heredera universal a su esposa y prima doña María del Carmen Pérez de Barradas y Bernuy, hija del marqués de Peñaflor. 
¡Por lo visto a esta gente la vida le daba mucha pasta pero muy pocos hijos...!
Desde luego que le podría haber dejado la herencia a sus sobrinos, los Cabrera, pero no fue así... 
Esta Carmen se casó, en segundas nupcias, con Teobaldo de Saavedra y Cueto, primer Marqués de Viana, hijo del duque de Rivas el famoso escritor...  La marquesa que no había tenido descendencia con su primer marido tampoco la tuvo con el segundo, heredando toda esa inmensa fortuna el sobrino del marqués de Viana y dejando a los sobrinos de su primer marido con un palmo de narices.... 
Tanto, que su cuñada por parte de su primer esposo, de vez en cuando la visitaba para pedirle ayuda económica y me imagino que para exigirle parte de la herencia de sus hijos que legalmente le correspondía. 
El caso es que según la página de "Cabrera-Villaseca" pasa un poco de puntillas de como debía de sentirse los sobrinos del primer marido y marqués de Villaseca cuando se enteran que a la muerte del segundo esposo y marqués de Viana la inmensa fortuna de su tío pasa a manos de sobrino del segundo esposo ¡Que ni pinchaba ni cortaba en la familia!
¡Vamos, que yo soy y arrastro del moño a la marquesa por todos los patios del palacio si le quita a mis hijos lo que es suyo! Claro, que por eso no soy de sangre noble, soy del pueblo llano.... Jejeje
Bueno sigamos que aquí viene lo importante: En esto que muere el marqués de Viana y dos años después de su muerte la marquesa se entrevista con la familia Cabrera y de ahí sale una promesa para compensar en parte lo perdido y que les pertenecía por derecho. 

Y transcribo lo que se dice en la página Cabrera Villaseca porque no tiene desperdicio:

"Fallece Teobaldo en Moratalla el día 26 de diciembre de 1.899 y después para preparar el traslado del cadáver, tuvieron que firmar el Ayuntamiento de Hornachuelos y la casa Real, y así dejar que se embalsamara y poderlo trasladar a Madrid. 
 - Marcha a Madrid la Marquesa de Viana, dos años después de fallecido su marido y al paso por Córdoba, se entrevista con sus parientes los Condes de Torres Cabrera. Quería comentar con ellos lo que había logrado, entrar en el famoso pleito histórico, que mantenían con la familia de su primer marido. 
 -Lo hizo, por que como había tenido que pedir muchos favores, para poder entrar, por ser un pleito de sangre, con seguridad a ellos se lo habrían comunicado. Como existía una buena relación entre ellos, creyó oportuno comentárselo. Paso todo el día con ellos. 
 -Llega a Madrid, la Marquesa de Viana, según relata en una carta a Doña Pilar de D. José Luque, llegó enferma. 
Yo pienso - continua el escrito- que agobiada por las circunstancias, que había visto en Córdoba y el fallecimiento de su marido Teobaldo.
- Cuando llegó a Madrid según comentaron de la manera que llegó, no se levantó de la cama y falleció a los pocos días. El día 28 de Mayo de 1.901. 
-Sin dar mi opinión relato- continua el relato de la página- En el archivo de Viana, he encontrado una factura de la farmacia a nombre del Conde de Urbasa (título que no usaba desde que heredó el Marquesado de Viana) por la compra de Quinina, y agua de cal. 
Cuando consulto en internet leo que son productos muy peligroso, a veces letales. "
                                                                                                             (Firmado por la marquesa viuda de Villaseca)

¡¡Madre mía, que le dieron "matarile" a la marquesa!!
Mi pregunta es: ¿Si el ya marqués de Viana no usaba el título de Conde de Urbasa, por qué lo utilizó para esa factura de farmacia? ¿Quién saldría perjudicado si la marquesa rectificara el testamento si no fuera él?

Y otra cosa, ¡ Hay que tener muy pocas luces para dejar esa factura en el archivo!
A mí se me ocurre que solo al nuevo marqués le beneficiaba que quedaran las cosas como estaban... ¡¡Todo esto hablando desde la presunción!!
Por lo visto la marquesa al llegar a Madrid de Córdoba y encontrase mal quiso ver al notario por la promesa que le había hecho a sus cuñada de "beneficiar en parte" a los sobrinos de su primer esposo. 

El caso es que el sobrino político de la marquesa y heredero del título de Viana se marchó junto a su esposa en un largo viaje según señalan algunas cartas, para intentar olvidar la perdida de la señora marquesa y su tía política...
¿Intentar olvidar o quitarse del medio?

En la página también dice esto:

"Doña Pilar escribió a D. José Luque, preguntándole si había hecho algún testamento la Marquesa de Viana, cuando llegó de Córdoba y le contesta que había hecho algo ológrafo. -Por lo que Doña Pilar se ilusionó y luchó para poder leerlo. 

Mandó a su abogado Barroso y al final, después de mucho tiempo, logró que se lo dieran. 
-Trataba del reparto de sus joyas entre sus hermanas. 
 -Al parecer, si cumplió con Doña Pilar la Marquesa de Viana. 
Pero se comenta que el documento en cuestión “desapareció "
Cuestión que con detalle me contó uno de los ya fallecidos, que le contaron un contemporáneo de esa época. "

(Firmado por la marquesa viuda de Villaseca)

Y así se quedó todo como estaba viendo los Cabrera como la herencia que les correspondía por sangre se lo llevó un "advenedizo" que comenzó la cuarta etapa es donde aparece el marquesado es de Viana, ya que heredó de sus tíos una inmensa fortuna y entre los muchos bienes está el palacio.
Este marqués de Viana fue militar de carrera e amigo intimo de Alfonso XIII que por cierto le regaló parte de las armas de Boabdil de las que custodiaban la familia Villaseca  desde antaño y que desde luego era un legado cordobés.
Respecto al segundo marqués fue el propulsor colecciones que han llegado hasta nuestros días; como la de los azulejos, los cueros etc...
Pasando al tercer marqués de Viana que junto con su esposa son los responsables del aspecto actual del palacio; dándole a los patios un aspecto mucho más señorial que antaño.
El marqués como muchos de estos propietarios murió sin descendencia nombrando heredera a su esposa Sofia Amelia de Lancaster, esta es la señora que quiso vender el palacio y que tuvo que comprar Cajasur en 1980.

Su fachada principal fue realizada por Juan de Ochoa, de estilo manierista.
Destaca tanto su número de patios, en total 12, como por la calidad artística de los mismos.
Anteriormente, el Palacio perteneció a la familia Villaseca y estuvo habitado hasta no hace demasiado tiempo; actualmente, es una ostentosa residencia convertida en museo, ocupando una extensión de más de 6.500 metros cuadrados, la mitad de ellos de jardines y patios.

Los hallazgos arqueológicos hacen pensar que el inmueble partió de la infraestructura de una construcción romana.
La casa, con parte austera y otra ostentosa, se puede apreciar la evolución de la arquitectura cordobesa desde el siglo XIV hasta hoy.
Son doce los patios en total más el jardín:
Plano recogido en su web

El Patio de Recibo
El Patio de los Gatos
El Patio de los Naranjos
El Patio de las Rejas
El patio de la Madama
El Patio de la Alberca
El Patio del Pozo
El Patio de la Columnas
El Patio de los Jardineros
El Patio de la Capilla
El Patio del Archivo
El Patio de la Cancela
El Jardín


Patio de Recibo 
Patio principal de las casas de los condes de Torres Cabrera, del siglo XVII, llamado así por la existencia de una capilla anexa al patio

Patio de los Gatos
El Patio de los Gatos: Tiene la particularidad de ser el patio de vecinos documentado más antiguo de Córdoba, ya que las casas comunales que lo forman, conocidas como Casas de la Puentezuela de Tres Caños, fueron adquiridas por los propietarios del Palacio en el siglo XVI, y mantenidas como viviendas de alquiler hasta mediados del siglo XVIII.
Patio de los naranjos
El Patio de los Naranjos: Rememora la tradición musulmana del jardín-huerto árabe.
El jardín era para los musulmanes un espacio privado, dónde el agua y las plantas eran utilizados como los principales elementos decorativos. A esta función se le añadió un aprovechamiento agrícola como muestran los cítricos que pueblan el patio.
Patio de la Rejas
El Patio de la Reja: El único que mira al exterior de los que hay en Viana, éste en concreto a través de sus tres ventanales que cierra sus vanos con rejas de forja que darán nombre a la calle a la que se asoman, Rejas de Don Gome, nombre del propietario del Palacio en aquella época.
Patio de la Madama
Patio de la Alberca
Patio de la Alberca: Es un patio de servicio, también llamado del Invernadero.
Patio del Pozo
Patio del Pozo: El pozo es el auténtico protagonista de este patio de servicio. Toma sus aguas del arroyo el Colodro, del que obtiene caudal suficiente para abastecer a todas las fuentes y plantas del palacio.
Patio de las columnas

Patio de las Columnas: La construcción de este patio es de los años ochenta, estando ya el Palacio abierto al público. Está concebido como un lugar para dinamizar Viana y albergar actos que impliquen una mayor interacción con los visitantes.

Patio de los Jardineros
Patio de los Jardineros: Recibe este nombre por encontrarse en él la habitación donde se guardan las herramientas del equipo de jardinería.
Patio de la Cancela
Patio de la Cancela: Actual acceso a Viana, era el patio de entrada de la casa de los condes de Torres Cabrera, adquirida por los propietarios del palacio en el siglo XIX, con lo cual perdió su función de patio de entrada.
Patio del Archivo
Patio del Archivo: Es el más interior de todos los patios de Viana y una muestra del más sobrio barroco cordobés. En la entreplanta se ubica el valioso archivo histórico de Viana, que consta de más de 400.000 documentos, siendo los más antiguos del siglo XII.
Jardín
El Jardín: Está estructurado en 16 parterres de boj, en cuyo interior crecen rosales, palmeras datileras, cítricos…
El conjunto está declarado Jardín Artístico.

En sus salones se pueden admirar excelentes pinturas, óleos de la escuela de Brueghel, colecciones únicas de armas de fuego cuyo grueso de la colección la forman 24 arcabuces y todas clase de armas desde el siglo XVII al XIX.
Una colección de cerámica, alfombras, cordobanes, guadamecíes y algunos tapices, estos se tejieron en la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara.
La colección arqueológica exponen en sus pasos conociendo diferentes periodos y culturas.
Hay 4 que destacan, tejidos sobre cartones de Goya: "La Dama y el Militar", "La acerolera", "El balancín", del cual se cree que es el único tapiz tejido sobre este cartón y "Los Zancos", el más conocido.
Decorando las paredes de la galería, una original Colección de Cueros:
Esta es una de las joyas del Palacio, formada por más de 30 piezas excepcionales de los siglos XV al XVIII. En esta colección hay 4 cordobanes, o cueros trabajados sin color.

La Biblioteca, donde hay más de 7000 volúmenes escritos en diferentes idiomas y que tratan temas muy variados, entre los que podemos encontrar varias ediciones del Quijote, la Biblia Vulgata, Cuentos ilustrados por Doré, etc… o un manuscrito del siglo XV, escrito a dos tintas, copia del Thesoro de Brunetto Latini.

También existe una Colección de Libros de Caza, original y a la que el II marqués de Viana era un gran aficionado, publicados entre los siglos XVI y XIX. Destaca el libro sobre el Bosque de Doña Ana, actual Coto de Doñana, en el que se narra una cacería famosa a la que asistió el rey Felipe IV, fechado en 1624.

Una maravillosa Galería de Azulejos, con el pavimento con mosaico romano, dónde se encuentra esta colección formada por 236 piezas procedentes de diferentes alfares hispano-árabes y españoles, y datadas entre los siglos XIII y XIX. Una de las pocas colecciones de este tipo que existen en el mundo.
Se incluyen piezas con diferente temática, si bien predomina la heráldica, pudiendo también encontrarse algunas con motivos gremiales, eclesiásticos, escenas de tauromaquia y rótulos de calles.

Los salones reflejan por sus nombres la utilidad que se les dio: de las Porcelanas, de las Firmas, de Tobías, del Mosaico.
Las habitaciones muestran el mobiliario original y su biblioteca consta de valiosos ejemplares, hasta un número de siete mil. Por último, son también destacables los pavimentos con mosaicos romanos y la carpintería de talla y artesonados mudéjares y renacentistas.




En 1978 aparece un anuncio en la prensa francesa en la revista francesa Jours de France ofreciendo la venta de un palacio del siglo XV en Córdoba, motivó en la ciudad un movimiento general de repulsa y reproche popular por considerar que se iba a poner a la venta parte de nuestro patrimonio. 
Cajasur llega a un acuerdo con la marquesa siendo adquirido por este banco  en 1980, que abre sus puertas al publico en 1981, siendo reconocido ese mismo año como Monumento Artístico Histórico Nacional.



Para mayor información visiten su Web: Palacio de Viana

Fuentes consultadas:
Los Suarez de Figueroa y el señorío de Feria de Pedro Mazo Romero- Origen de las casas principales del señorío de Fuencubierta de Fernando Moreno Cuadro- Palacio de Viana fundación Cajasur- Página de Cabrera- Villaseca-Fotos y parte de la información recogidas la Web del Palacio de Viana

viernes, 18 de septiembre de 2009

La Casa-Palacio Villalones o de Orive

La leyenda de la vela y el cambio de nombre del palacio.


Fachada del Palacio de los Villalones





Nueve mil quinientos metros cuadrados de superficie enclavados en el centro histórico de Córdoba, con un jardín de ocho mil cuatrocientos que en un principio no le pertenecía al palacio pero que uno de los propietarios compró ya en el siglo XX.  
Si tuviéramos que decir desde cuando existe construcciones donde hoy se ubica el palacio de Villalones tendríamos que remontarnos a la época romana, ya que excavaciones arqueológicas realizadas en el siglo pasado así lo confirman. 
Por lo visto en aquel verano del 92 se hicieron catas arqueológicas en lo que fue el antiguo huerto del convento de San Pablo para contrastar una antigua hipótesis de que allí se encontraba lo que fue el anfiteatro romano de la Colonia Patricia defendida entre otros muchos eruditos cordobeses como por el director del Museo Arqueológico de los años 50, D. Samuel de los Santos Gener, al identificar como parte de un supuesto anfiteatro en un muro encontrado en la calle Santa Marta paralelo a la calle San Pablo... 

La verdad es que este hombre no iba muy descaminado y a pesar de que no era el anfiteatro que él creyó y era parte del Circo Romano.

Placa del palacete
En distintas catas encontraron cerámica del periodo I d. C y en distintas fases paredes finas, barniz rojo Pompeyano, ánforas y cerámica de tradición ibérica y una cloaca, en otra diversos estilos de épocas de diferentes Césares, como barniz rojo Julio- Claudio o cerámica de la época de Nerón o los primeros años de Vespasiano y encontrándose hasta una moneda de Claudio II fechada en 268-270.

Documentándose que los restos encontrados corresponden a los muros de cimentación de la Gavea septentrional del Circo Romano lo que supone que estaba ubicado frente al templo de Capitulares.
Durante la época Califal la zona está poblada de Almunias que a lo largo de los siglos sufrirían trasformaciones al igual que toda la ciudad.
Sobre estos restos encontraron un conjunto de casas de la época islámica tardía, concluyendo que podríamos encontrarnos sobre un barrio de la época Almohade, en total 12 casas. Encontrando pinturas en los zócalos de sus muros aunque en muchos casos solo se conserva el rodapié y del que nos hablan ampliamente Alvaro Cánovas, Silvia Carmona y Román Rivera en su trabajo de "Las pinturas Almohades del palacio de Orive" donde nos hablan de las formas y de los colores y en el que llegan a la conclusión de que son de los pocos ejemplos que existen en la península ibérica del periodo de transición de la Antigüedad y la Edad Media.

Preciosa fachada a tres cuerpos
Con la llegada de Fernando III "El Santo" entregó aquel inmenso terreno a los frailes donde fundaron el convento de San Pablo y una gran parte del terreno concedido se destinó a huerto.
Los terrenos pertenecieron a lo que en un principio fue convento de San Pablo al igual que prácticamente toda la manzana, ya que los frailes fueron vendiendo parte de ese terrenos en momentos de estrecheces económicas y donde surgieron casas aledañas al convento.

Pero sigamos:
El palacio fue construido según Ramírez de Arellano en sus "Paseos por Córdoba" está construido sobre una casa perteneciente a los Hoce que fue derruida por mandato de D. Pedro I llamado "El cruel" en venganza por el apoyo que se le dió a su medio hermano Enrique II "El Trastámara" en tiempos de la guerra fratricida entre ambos.

Pero, ¿Quién fueron estos Villalones?

La primera referencia documental de la familia Villalón es de principios del siglo XV que se encuentran viviendo en la collación de la Magdalena, muy posiblemente de origen converso por su oficio "traperos" con cierto nivel económico lo que le permitió hacer matrimonios ventajosos para un ascenso social.
El solar sobre el que se generará el Palacio de Orive o de Los Villalones se remonta al 23 de Marzo de 1508, fecha en la que Juan García de Villalón, trapero de profesión, vecino de la collación de San Andrés otorga testamento sobre las casas, también aparecen datos de ocho años después, en 1516 aparecen las casas de Juan García, en una sentencia de los inquisidores de Córdoba, haciendo referencia de que eran linderas con el monasterio de San Pablo. 
Es en Mayo de 1529, donde aparece registrado el testamento:

"de Francisco García Villalón, hijo de Juan García Villalón, vecino de San Andrés. (...) Manda a su hijo Francisco de Villalón las casas principales de su morada en la calle del pilar de San Pablo y dos casas-tienda en forma de vínculo para sus hijos y descendientes". 

Estas casas de Juan de Villalón conformaron el núcleo de la posterior "casa principal" de los Villalones. Según G. J. H Moya en su trabaja de "Casas y Palacios históricos de Córdoba" nos cuenta que un vástago de esta familia, un tal Jerónimo de Villalón, fue el primer propietario del mayorazgo llamado “La Magdalena”, que incluía como bien vinculado unas casas con su plazuela  en la calle "Pilar de San Pablo". 
Su nieta, doña Leonor de Villalón, casaría en el año 1600 con su primo don Alonso García de Villalón, poseedor de otro importante mayorazgo.
Según la casa de los Cárcamo y los Oribes
Una descendiente de estos doña Beatriz de Villalón y Cárcamo hija de D. Alonso Villalón y doña Antonia de Cárcamo se casó con un tal Fernando de Oribe Salazar y Ulloa nacido en Brozas, Cáceres y que pasó a Córdoba siendo Veinticuatro de la ciudad.
Es aquí donde se comenzó a llamar al palacio el de Oribe o orive, por ser caballero muy conocido en la ciudad.
Tuvieron este hijo Alonso de Oribe Villalón, que nació en la ciudad de Cazorla provincia de Jaén, hallándose en ella de paso sus padres, fue vecino de Córdoba, casándose con la hermana del cuarto Vizconde de Miranda ¡Como podréis comprobar entroncaron con familias de abolengo!
Su expediente de pruebas de caballero de Alcántara en 1699 , nos dan la referencia definitiva del palacete pues se alude "a las casas de don Alonso de Orive y Villalón, pretendiente, que están junto a la parroquia de San Andrés, y en el zaguán de dichas casas está un escudo con diversos cuarteles y diferencias de armas" y continúa " (...) que las primeras dicen ser las de Villalones y las segundas de los Cárcamos (...) " Es la evidencia de que aunque desde entonces fueran los Orive sus propietarios por la unión matrimonial de sus padres aunque la denominación más justa de este palacio es el de Villalón. 

Sigamos con el Palacete:

El afán de ostentación se manifiesta cuando ambos apellidos se unen y sobre todo en la fachada ricamente decoradas con bonitos escudos pero la existencia de una casa previa condicionó en parte la reforma de la fachada que Hernán Ruiz II construyera en 1560 con sillares de piedra caliza aunque no guarda ninguna simetría. Está dividida en tres cuerpos. La planta baja o primer cuerpo, donde se encuentra la puerta principal flanqueada con dos columnas de fuste acanalado y con capiteles dóricos.
En su dintel existe un medallón a modo de escudo donde se puede ver una mujer de medio cuerpo con una cinta con una inscripción latina que dice:
Bona Fides est Magna Virtus o traducido quiere decir: "La gran virtud es la buena fe"
y dos cartelas con cabezas de león a cada lado, sin duda símbolo de dominio.
Dintel de la Puerta Principal
Se remata con una cornisa sostenida por siete ménsulas y un friso decorado con flores, círculos y escudos.
La primera planta o segundo se dispone de una ventana encuadrada en una guirnalda de flores.
Es segundo piso o tercer cuerpo, se ve inmediatamente que fue concebido como mirador que está compuesto por tres arcos peraltados sobre columnas rematados con decoración geométrica a base de espirales.
Precioso zaguán del palacete
La Leyenda

La puerta principal da entrada a un zaguán o recibidor, donde sucede según la leyenda la terrible leyenda cuyos protagonistas fueron el dueño de la casa en aquellos momentos, el Corregidor D. Carlos de Ucel y su hija, completan el elenco: Una gitana, una maldición, unos judíos, una vela y un tesoro. ¿Quién puede dar más para una historia?
Por lo visto cuenta la leyenda que el corregidor que desgraciadamente había enviudado cuando su esposa dio a luz a su preciosa hija llamada Blanca.
El pobre hombre volcó todo su amor en aquella pequeña que creció tímida, orgullosa y muy, caprichosa... 
Blanca, que así se llamaba la muchacha, no salía jamás sola fuera de palacio siempre salía acompañada, en uno de esos días que iba con su padre y su nana a misa se le acercó una anciana harapienta para leerle la buenaventura en la mano...
Doña Blanca, al ver el aspecto de la mujer le repugnó tanto su indumentaria y aspecto físico que le retiró la mano he incluso hizo ademán para que fuera retirada de su presencia, cosa que a la gitana no le gustó nada y la maldijo diciéndole: 

"Pagará con llantos todo ese orgullo"

Pasado un tiempo, era noche cerrada y tormentosa cuando llamaron a la puerta de palacio, como siempre unos de los criados abrió y al poco tiempo fue en busca del corregidor para decirle que unos señores de "aspecto raro" querían hablar con el señor.
Ventana que se encuentra en el Zaguán
Salió el Corregidor y eran unos hebreos que habían venido a Córdoba para hacer negocios y que no encontraban posada para guarecerse de la lluvia, le pidieron albergue en la casa, alegando que no molestarían más de lo necesario ya que a primera hora del alba saldrían de nuevo de camino. Don Carlos que al saber el infortunio y la mala noche que había por delante les permitió dormir en el zaguán.

Doña Blanca algo curiosa, por las horas de la visita y por lo que había dicho el criado, quiso observar a los judíos por la noche a través de las celosías que daban al recibidor de la casa, y junto con su nana ambas observaban la indumentaria de aquellos raros viajeros que sin duda era muy diferente a la que estaba acostumbrada a ver, y sus cabello ya que jamás había visto a hombres con unos tirabuzones a ambos lados de su rostro...
Estaban en ello cuando de pronto vieron que los invitados de su padre dijeron que deberían de guardar lo que traían, sacaron de una caja y de ella una vela que encendieron, rezaron unas oraciones y el suelo del zaguán se abrió apareciendo una escalera que invitaba a bajar...
Galería en torno al patio

Los hebreos sacaron de las alforjas que llevaban un montón de bolsas de cuero que fueron abriendo y contando pues estaban llenas de piedras preciosas y monedas de oro; con ellas descendieron por la escalera al fondo del hueco abierto en el suelo y al momento regresaron sin nada, al momento de apagar la vela, de nuevo se cerró el suelo sin deja rastro alguno de lo que había ocurrido.
Blanca y su nana se quedaron petrificadas al descubrir que el suelo de su propia entrada a su casa lo estaban utilizando para ocultar un tesoro...
Llegó la mañana siguiente, y los viajeros se despidieron del Corregidor, dándole las gracias por la generosidad con que los había hospedado.

Una vez que se habían marchado, la hermosa Blanca ardían en curiosidad por saber el misterio de tantas y codiciadas riquezas... 
Examinó el portal y nada se advertía diferente en su pavimento, hasta que vio esparcidas por él muchas gotas de cera desprendidas de la vela encendida por aquellos extraños la noche anterior.
Las juntó cuidadosamente y rehízo de nuevo una pequeña vela con la que creía que se abriría el suelo... Esperaron la noche ella y su criada, y cuando todos estaban dormidos bajaron al zaguán y encendiendo la pequeña vela dijo aquellos especie de rezos que recordaba de la noche anterior.
Logrando que se abriese el suelo y apareciese de nuevo la escalera por la cual, Blanca bajó en busca de las riquezas.
Galería en torno al patio

La criada, mientras vigilaba que la pequeña vela no se apagara pues sabía que si se apagaba el suelo se cerraría y viendo que pasaba demasiado tiempo, la llamaba diciéndole que se estaba demorando demasiado y la vela se apagaría...
Pero Blanca seguía recogiendo riquezas sin hacerle caso a su criada.
- Un ratito más nana, le decía Blanca desde abajo
Hasta que la vela se consumió, cerrándose la tierra sin que pudiera escapar y bajo el suelo quedó enterrada para siempre la muchacha que gritaba pidiendo ayuda.

Cuentan que su padre se volvió loco ya la oía gritar y llorar y que por muchas excavaciones que mandó realizar, fue imposible encontrarla muriendo de tristeza y desesperación.

(...) D. Carlos de Ucel murió solo y desesperado y desde entonces se dice que una sombra misteriosa recorre de noche toda la casa y a la que se le atribuye que es el alma de doña Blanca que aún vaga por aquellos pasillos (...)

Dicen que una sombra femenina se pasea todavía por palacio y a veces se escucha gritos pidiendo socorro y llantos.
Como curiosidad hasta no hace mucho tiempo se podía ver la losa que se abrió y por donde Blanca bajó... y hubo más de un  grupo de chicos y chicas que intentaban levantar la losa para comprobar si era cierto si debajo había algún pasadizo.... Tantas veces ocurrió que fue el Ayuntamiento el que ordenó cambiar la solería del zaguán para que no se determinara con el pasó del tiempo donde estaba dicha losa.

Esta es la leyenda que a mi humilde entender que el medallón de la mujer en el dintel de la puerta, ayudó mucho para la fabulación de la historia.

Pero sigamos con la descripción del Palacio:
Desde el zaguán se accede a una galería a manera de pórticos y al Patio de Recibo, en torno al que se desarrollan las habitaciones. El patio principal tiene tres de sus lados con galerías porticadas cubiertas por un forjado de vigas de madera

Como se encontraba el patio principal
Patio Principal en la actualidad
Su alzado presenta arcos de medio punto  en el primer cuerpo y en el segundo cuerpo. Las columnas acanaladas y el capitel, de orden toscano. 
La planta alta presenta arcos de tipo carpanel de herradura muy utilizado en el siglo XIV, todos sobre columnas. Las vidrieras fueron realizadas por Antonio Cabello ya a principios del siglo XX.
Fuente del Patio
En el centro se encuentra una fuente, destacando el friso que la decora entre el blanco mármol del suelo.
Segundo patio o de recibo
Si se entra por el zaguán desde la puerta principal se encuentra a mano derecha, si en cambio se entra por la otra puerta se lo encuentra en frente. Se puede apreciar su suelo con el típico chino cordobés, la reja da al jardín de Orive antiguo huerto de San Pablo.
Parte del inmenso jardín, antes huerto de San Pablo
Veréis:
Todo lo que ahora podemos disfrutar como jardín fue en su momento huerto del Convento de San Pablo... Pero este huerto guardaba un bello tesoro lo que se le llama "La Sacristía" hoy rehabilitada y llamada "Sala Capitular" es uno de los elementos conservados del antiguo monasterio, obra inacabada de Hernán Ruiz III .
Maqueta de la Sala Capitular
Por lo visto la edificación fue financiada el Obispo fray Martin de Córdoba obispo desde 1578 a 1581, a la muerte de éste fueron muchas las dificultades de la comunidad dominica lo que impidió la continuación de las obras y jamás llegó a concluirse, utilizándolas los frailes como horno- panadería y vendida junto la venta del huerto que en un principio fueron registrados a nombre de Luis Beltrán de Lis y Rives.

Buscando, lo único que he encontrado que guarde relación con Córdoba es a un tal Manuel Beltrán de Lis y Rives valenciano de familia de origen noble caída en desgracia por militar en el bando austriaco en la guerra de sucesión de la corona española ¿Qué cuál fue esa guerra? En la que los Borbones ganaron una corona que no les pertenencia...
Parte de la Sala
Que llegó a ser diputado de Cortes por Córdoba en 1844 del partido Moderado que no era otro que el liberal cuando pactaron la regencia la María Cristina de Borbón- Dos Sicilias.
Repasando el trabajo de Manuel Ardit Lucas "Los orígenes de la familia Lis de Rives" encabezada por su ascendiente Vicente Beltrán de Lis, se puede ver como el ascenso social al igual que el económico, es rápido y no le hacen ascos a nada... Empezaron vendiendo pan y terminaron vendiendo armas.

El señor Manuel del que hablamos formó parte de varios gobiernos y hasta llegó a ser Ministro por tres veces, una de ellas de Hacienda.
Como dato muy curioso es el comentario tan significativo en una publicación madrileña del año 1850 dice así:

"(...) llegó a ser Ministro de Hacienda como por ensalmo (Con gran rapidez y de forma inexplicable) y quiso adoptar los medios oportunos para hacer reformas necesarias pero no pudo, porque la confusión y el desorden son patrimonio exclusivo de la gente aficionada al embrollo y río revuelto"
(Semblanzas)

Curioso que no se sospeche después de leer este artículo publicado que en vez de poner que COMPRÓ dice "REGISTRADO"
¡¡Esto desprende un tufo enorme!! De un señor que no se le conoce mucho más en Córdoba que presentarse a las Cortes por esta ciudad... Recordemos que fue el primer ministro que firmó el concordato de la Santa Sede acordando el restablecimiento de las relaciones iglesia- estado... ¿Sería algún pago? ¡Ahí lo dejo!

Ese Huerto denominado de San Pablo y el Almezo no perteneció al palacio hasta en siglo XX, más concretamente Diciembre de 1919 que fue adquirido y unido a la propiedad por D. Gregorio García Mateo.
la extensión era tan grande que el propio D. Gregorio vendió parte de él para el cine Coliseo que se encuentra en San Andrés hoy en desuso...

Bueno, sigamos con el Palacio:
Según el trabajo realizado por D. Francisco Gómez Díaz y otros en el trabajo "El palacio cordobés de los Orive: Sobre la intervención de Hernán Ruiz II"- fue D. Alonso Tomás de Orive Villalón y Gutiérrez de los Ríos que en 1762 por problemas económicos alquilando el Palacio a D. Andrés Baena y Hermoso por 1200 reales de vellón por tres años. 
Parte de la familia Orive marchan a Las Palmas de Gran Canaria donde prosperan en negocios de comercio marítimo.

Más adelante el precioso Palacio fue administración de correos en 1830, en 1896 fue escuela de Artes y Oficios, Atarazana Municipal y colegio Superior Francés, del que disponemos de fotografía y donde se puede apreciar la fachada encalada.
Cuando era Colegio Superior Francés

Es como hemos dicho con anterioridad que a principios del siglo XX, exactamente en 1919, el Palacete es comprado por la familias García- Courtuis.
Tanto D. Gregorio como su esposa doña Paz fueron esenciales para mantener la estructura del Palacio, una joya que sin ellos jamás hubiera llegado hasta nosotros, dejando su legado en un diario con las reformas que hicieron:
En ellas cuenta que se encontraron el palacio en lamentables condiciones
Muchos de sus elementos esenciales, estaban tabicados, aprovechando buena parte de estos espacios para clases cuando fue Colegio Superior Francés. Del mismo modo, el piso inferior de la fachada estaba carcomido por la debilidad y porosidad de la piedra calcarenita, amenazando una ruina más que segura. Rehabilitó daños ocasionados por los carros que transitaban en la calle de los Villalones- como bien dice D. Francisco Gómez Díaz-La ventana de la fachada que da al callejón de los Villalones estaba tabicada, posiblemente por la peligrosidad de algunas grietas, humedades en los pisos bajos, deterioro de artesonados a causa de las termitas;

Eliminó la tabiquería que se había realizado durante los años por otros e incluso sustituyó elementos sustentantes que, de otro modo, habrían generado el desplome de alguna de las crujías del patio. En cuanto al zaguán de entrada, D. Gregorio eliminó algunas obras que habían transgredido el sentido de la pieza, dejándolo más diáfano y se realizó la reja del zaguán por Miguel Pavón y según diseño de Paz Courtois, Antonio Cabello realizó las vidrieras que cierran las galería del patio principal y la restauración de la piedra corrió a cargo del cantero Bienvenida. Toda esta remodelación fue en los cincuenta años que vivió allí el matrimonio con su familia.

El Palacio de Orive y su jardín que se incluye la Sala Capitular ahora remozada, fue adquirido en 1992 por el Ayuntamiento de Córdoba a la familia García Courtoy por la nada despreciable cantidad de 330 millones de las antiguas pesetas.


*Editado para poner fotografía nuevas 2016
*Editado y ampliado información  en 2018



Fuentes consultadas:
Índice de memoria del proyecto de rehabilitación del palacio de D. Javier Ruiz Cabrero y Jorge Silvetti Gerencia de Urbanismo -La recuperación del huerto de Orive por I. M Diario de Córdoba 20/08/2008- Description genealógica de la Casa de Aguayo pag cec- Resultados de la intervención arqueológica realizada en el palacio de Orive de Córdoba por Dolores Ruiz Lara, Juan F. Murillo Redondo y otros.- Boletín Oficial de la Junta de Andalucía - Histórico del BOJA Boletín número 110 de 23/09/2000- Boletín de la Real Academia de Córdoba de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes- Pinturas almohades en el Palacio de Orive por Alvaro Cánovas, Silvia Carmona y Román Rivera- Paseos por Córdoba,: o sean apuntes para su historia escrito por Ramírez De Arellano Teodomiro, Teodomiro Ramírez de Arellano y Gutiérrez-Casas y palacios Histórica de Córdoba: Una señalización de patrimonio de la Unesco por hacer de Gonzalo J. Herreros Moya- Horneros , negociantes y corsarios. Los orígenes de la fortuna  de Vicente Bertrán de Lis y Tomás por Manuel Ardit Lucas Universitat de València- El palacio cordobés de los Orive: Sobre la intervención de Hernán Ruiz II de Francisco Gómez Díaz, Antonio Luis Ampliato Briones, Maudilio Moreno Almenara, Juan Francisco Murillo, Dolores Ruiz Lara *Gerencia Municipal de Urbanismo. Ayuntamiento de Córdoba